Es tan trillado el tema pero nunca pasa de moda y mucho más cuando se trata del "clásico"...
Es tan trillado el tema pero nunca pasa de moda y mucho más cuando se trata del "clásico" cruceño entre Oriente Petrolero y Blooming, de que "es un partido aparte y que las estadísticas no cuentan".Y esta vez tiene mucho de cierto ya que ambos llegan con rendimientos altos y buenos que ninguno inclina la balanza a su favor y en cambio, son favoritos a la victoria en la edición 167.
Cómo llegan. El hecho que de Blooming haya ganado los tres partidos que disputó que lo ubican en el tope de la tabla de posiciones y sin goles en contra, es una carta de presentación digna de respeto y para tomar muy en cuenta.
Sin duda, esto hace que adquiera el cartel de favorito al triunfo, pero no solo ello, ya que por lo mostrado no solo jugando en Santa Cruz sino fuera, es un equipo muy distante de aquel de rendimientos lamentables del anterior torneo y eso sin duda que para los rivales es complicado.
Por su lado Oriente Petrolero, aunque su puntaje no es alto, en los tres partidos que jugó mostró también otra cara, y eso que dos partidos los jugó de visitante.
Es cierto que a ambos les falta corregir muchos aspectos, como seguridad defensiva, mejor circulación en el medio y, (como todos los equipos del país), mayor efectividad.
Los equipos. Tanto Eduardo Villegas como Mauricio Soria, aunque ellos afirmen lo contrario, ya tienen definido sus equipos titulares que saltarán al campo del "Tahuichi" Aguilera.
Salvo que ocurra algo inesperado de último momento, serán los mismos que han estado jugando.
En este aspecto, la sorpresa de Villegas puede ser la inclusión del experimentado Jorge Ortiz (ex Blooming), en la banda derecha por el aún inexperto para esta clase de partidos Enrique Áñez. El resto es lo ya que se conoce.
En Blooming no hay mayores novedades, tal vez, las dudas nacían por el hecho que algunos jugadores no estaban al ciento por ciento fisicamente como los casos de Martín Minadevino y Joselito Vaca, pero al parecer ambos se recuperaron y serán titulares.
El fururo. Ganar para Blooming significará por un lado, sacar una ventaja considerable respecto a Oriente en la tabla de posiciones, además de consolidarse como puntero y cortar una racha de más de tres años sin victoria. En cambio para Oriente, recuperarse de su último traspié y de paso ampliar su paternidad.